LA NACION Espectáculos

La emoción de ser parte de lo inesperado


Por Edda Bustamante




En un giro teatral imprevisto, la talentosa directora Cecilia Propato instala al espectador en un mundo sensorial visual casi al revés de toda propuesta experimentada hasta este momento. Ser al mismo tiempo el observador y el observado mueve todo el bagaje emocional, consciente o no, que uno arrastró camino hacia el teatro para pasar un momento relajado. Sorprenden con la propuesta visual, donde escenográficamente el espectador siente que hay vida detrás de paneles que contienen pero no muestran y, cuando proponen que uno se interne en el escenario, que lo camine, se abre la caja de pandora para vivir distintas historias, inesperadas. Con mano firme, la joven directora sostiene ese mundo fragmentado en imágenes y sensaciones y guía a sus actores, sin dejar de dar batalla, a la representación exacta, al movimiento justo que su talento imaginó. Gran dirección, excelente puesta en escena y una propuesta nueva, movible, intrigante.

23 de marzo de 2018